La Universidad Iberoamericana desarrolla leche para diabéticos que disminuye los niveles de colesterol en los pacientes y coadyuva en su autocuidado nutricio, reveló el investigador del departamento de Salud, José Saturnino Monroy Ruiz.
El académico explicó que la diferencia sustancial de este producto, respecto a otros, es que contiene esteres de esterol vegetal (grasa vegetal) y que los niveles de antioxidantes son los adecuados para coadyuvar al estado de estrés oxidativo que se presenta en pacientes con enfermedades crónicas no transmisibles.
Reiteró que el producto contribuye, dentro de un esquema alimenticio sano y actividad física, a mantener un equilibrio cuando se tiene una patología como la diabetes.
Esta leche para diabéticos es desarrollada por la Ibero, institución que celebra sus primeros 70 años, y el Grupo de Empresas Alpura, que dirige el egresado de la Ibero, Víctor Gavito y Marco, como parte de los proyectos de innovación que esta casa de estudios fomenta con las empresas. En este sentido, iniciaron el proyecto que lleva más de un año de trabajo planificado en tres ejes de acercamiento.
En el primero se siguieron las recomendaciones médicas y nutricias promovidas por la American Diabetes Association y la NOM-015-SSA2-2010, para la prevención, tratamiento y control de la diabetes mellitus.
En la segunda etapa atendieron las recomendaciones de la FDA de Estados Unidos o la Agencia de Alimentos y Medicamentos, por sus siglas en inglés; “las analizamos una por una y las tomamos en cuenta para el desarrollo del producto y su etiqueta, es decir, la información gráfica sobre su contenido nutricio”, añadió.
“Nos apegamos a lo admitido por la FDA porque esta agencia permite que los productos salgan al mercado, sólo si tienen un robusto respaldo científico”, detalló.
El tercer eje consistió en una revisión bibliográfica profunda para incluir aquellos nutrimentos que tuvieran robustez científica como nutrimentos que brindaran un beneficio a la salud más allá de la nutrición básica para las personas con diabetes y que tuvieran robustez científica como los esteres de esterol de origen vegetal.
El académico dijo que los alimentos, a diferencia de los fármacos, influyen en la salud del paciente a nivel crónico, se requiere de tiempo y paciencia para observar sus beneficios; en cambio, los fármacos son agudos y focalizados y resuelven el problema en poco tiempo.
Precisó que este producto no es más que un elemento de la alimentación sana que va a coadyuvar en el autocuidado del paciente, pero, como es un alimento, tiene que acompañarse de otros elementos como la actividad física y el tratamiento farmacológico del médico.
En tanto, el académico adelantó que la leche para diabéticos saldrá a la venta en cuanto pase las pruebas aplicadas por la Profeco y la Cofepris. Y mientras eso ocurre, desarrollan la leche para el adulto mayor.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) calcula que en el mundo hay 347 millones de personas que viven con diabetes, lo que significa una verdadera emergencia de salud pública porque pone en riesgo la viabilidad de los sistemas de salud.
Por otro lado, la más reciente Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2012, afirma que en México existen 6.4 millones de personas diagnosticadas con diabetes tipo 2, una de las primeras causas de muerte en el país.
En este sentido, Monroy Ruiz añadió que la leche para diabéticos y la leche para el adulto mayor, así como los proyectos de investigación que la Ibero realiza en conjunto con las empresas y el sector público, se destacan por su calidad, concordancia y pertinencia con los grandes retos que el país y el mundo demandan, en campos estratégicos como la salud y la nutrición.
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